El responsable de comunicaciones de la FAM sostiene que pese a las antenas seguirá habiendo zonas de sombra.
La solución definitiva a las zonas sin cobertura de telefonía móvil en el Pirineo oscense pasa por las comunicaciones vía satélite.
Este parece ser el único sistema que permitiría acceder sin problemas al teléfono de emergencias 112 desde el más intrincado valle o el más recóndito punto de la provincia en opinión de Antonio Gros, responsable de comunicaciones de la Federación Aragonesa de Montaña (FAM) y durante 35 años técnico de comunicaciones de Telefónica.
Montañeros, pastores y cazadores, principalmente, y usuarios de la montaña en general consideran un derecho básico poder contactar con los servicios de socorro siempre que sea necesario desde cualquier lugar.
De hecho, algunos rescates realizados este verano en el Pirineo se retrasaron precisamente porque no se pudo dar aviso telefónico de manera inmediata a los servicios de emergencia.
Y aquí surgen las preguntas: ¿Por qué en el siglo XXI, cuando internet nos comunica con el otro extremo del globo, se dan paseos espaciales y se ha conseguido posar un robot sobre la polvorienta superficie de Marte, la telefonía móvil no tiene señal en todas partes de nuestra provincia? Antonio Gros apunta varias cuestiones.
En primer lugar, señala la legítima actividad de negocio de las operadoras de telefonía móvil terrestre, "que, por lógica ley de mercado llegan solo adonde llega la gente porque su papel es el de hacer negocio con las telecomunicaciones".
Por lo tanto, a su juicio, si queremos que haya cobertura en las zonas despobladas, como es el caso de la montaña, "debe ser mediante compromisos entre las administraciones y las operadoras".
Gros evidencia una cuestión que muchas veces se olvida: "La responsable de la protección civil es la Administración y no las empresas de telefonía".
Las operadoras se limitan a cumplir su compromiso de allá donde dan cobertura, ser transparentes al sistema 112, se llame desde la compañía que sea.
Sin embargo, aunque se llegará a acuerdos entre las empresas de telefonía y la Administración, la solución al problema de cobertura no sería total.
"Las zonas de montaña son muy difíciles de cubrir con la redes actuales GSM digitales. Con la primera red analógica de Moviline había mejor cobertura, pero desde que se paso al sistema GSM, ahora mundial, las estaciones bases tienen.
Cuando se hizo este cambio de la telefonía analógica a la digital había zonas que estaban cubiertas y dejaron de estarlo", recuerda.
Además, es necesario que exista un acceso con vehículo hasta el punto donde se va a instalar la estación base, tanto para montarla como para permitir su mantenimiento y también debe contar con red eléctrica.
"Tenemos que subir andando a muchos refugios de montaña porque no hay acceso en vehículo, aunque en todos tenemos sistemas de comunicación".
Incluso con esas condiciones seguiría habiendo zonas de sombra por la propia orografía del Pirineo. "El caso más típico es Benasque. En cuanto te adentras en los valles transversales:
Estós, Eriste... no llega la señal.
Habría que poner una estación base en cada valle".
En opinión del representante de la FAM, para estar comunicados en cualquier lugar de la montaña donde no hay señal, hemos de buscar, por el momento, otras alternativas. "Están los walkie-talkie y los teléfonos automáticos satelitales, que son aparatos conectados a una red de satélites, lo que permite tener cobertura aunque estemos en el fondo de un valle".
Pero estas joyas de las comunicaciones no están al alcance de cualquiera ya que cuestan "alrededor de 1.000 euros.
El walkie de VHS es una alternativa más barata y da acceso a muchas redes de protección civil, a radioaficionados, repetidores que están abiertos y a los refugios de la FAM, donde hay una emisora constantemente a la escucha en una frecuencia que se utiliza en Aragón para el socorro de montaña (146.175 Mh). Muchos montañeros lo llevan", dice Gros.
En esta misma frecuencia hay emisora en los cuarteles del GREIM (Jaca, Panticosa, Boltaña y Benasque).
La solución definitiva a las zonas sin cobertura de telefonía móvil en el Pirineo oscense pasa por las comunicaciones vía satélite.
Este parece ser el único sistema que permitiría acceder sin problemas al teléfono de emergencias 112 desde el más intrincado valle o el más recóndito punto de la provincia en opinión de Antonio Gros, responsable de comunicaciones de la Federación Aragonesa de Montaña (FAM) y durante 35 años técnico de comunicaciones de Telefónica.
Montañeros, pastores y cazadores, principalmente, y usuarios de la montaña en general consideran un derecho básico poder contactar con los servicios de socorro siempre que sea necesario desde cualquier lugar.
De hecho, algunos rescates realizados este verano en el Pirineo se retrasaron precisamente porque no se pudo dar aviso telefónico de manera inmediata a los servicios de emergencia.
Y aquí surgen las preguntas: ¿Por qué en el siglo XXI, cuando internet nos comunica con el otro extremo del globo, se dan paseos espaciales y se ha conseguido posar un robot sobre la polvorienta superficie de Marte, la telefonía móvil no tiene señal en todas partes de nuestra provincia? Antonio Gros apunta varias cuestiones.
En primer lugar, señala la legítima actividad de negocio de las operadoras de telefonía móvil terrestre, "que, por lógica ley de mercado llegan solo adonde llega la gente porque su papel es el de hacer negocio con las telecomunicaciones".
Por lo tanto, a su juicio, si queremos que haya cobertura en las zonas despobladas, como es el caso de la montaña, "debe ser mediante compromisos entre las administraciones y las operadoras".
Gros evidencia una cuestión que muchas veces se olvida: "La responsable de la protección civil es la Administración y no las empresas de telefonía".
Las operadoras se limitan a cumplir su compromiso de allá donde dan cobertura, ser transparentes al sistema 112, se llame desde la compañía que sea.
Accesos y orografía
Sin embargo, aunque se llegará a acuerdos entre las empresas de telefonía y la Administración, la solución al problema de cobertura no sería total.
"Las zonas de montaña son muy difíciles de cubrir con la redes actuales GSM digitales. Con la primera red analógica de Moviline había mejor cobertura, pero desde que se paso al sistema GSM, ahora mundial, las estaciones bases tienen.
Cuando se hizo este cambio de la telefonía analógica a la digital había zonas que estaban cubiertas y dejaron de estarlo", recuerda.
Además, es necesario que exista un acceso con vehículo hasta el punto donde se va a instalar la estación base, tanto para montarla como para permitir su mantenimiento y también debe contar con red eléctrica.
"Tenemos que subir andando a muchos refugios de montaña porque no hay acceso en vehículo, aunque en todos tenemos sistemas de comunicación".
Incluso con esas condiciones seguiría habiendo zonas de sombra por la propia orografía del Pirineo. "El caso más típico es Benasque. En cuanto te adentras en los valles transversales:
Estós, Eriste... no llega la señal.
Habría que poner una estación base en cada valle".
Alternativas
En opinión del representante de la FAM, para estar comunicados en cualquier lugar de la montaña donde no hay señal, hemos de buscar, por el momento, otras alternativas. "Están los walkie-talkie y los teléfonos automáticos satelitales, que son aparatos conectados a una red de satélites, lo que permite tener cobertura aunque estemos en el fondo de un valle".
Pero estas joyas de las comunicaciones no están al alcance de cualquiera ya que cuestan "alrededor de 1.000 euros.
El walkie de VHS es una alternativa más barata y da acceso a muchas redes de protección civil, a radioaficionados, repetidores que están abiertos y a los refugios de la FAM, donde hay una emisora constantemente a la escucha en una frecuencia que se utiliza en Aragón para el socorro de montaña (146.175 Mh). Muchos montañeros lo llevan", dice Gros.
En esta misma frecuencia hay emisora en los cuarteles del GREIM (Jaca, Panticosa, Boltaña y Benasque).
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